Con la cabeza bien alta

Antes de nada decir, que la eliminatoria se ha perdido en un 95% por mi culpa y me explico; para eliminar a Molina nuestras aspiraciones pasaban por conseguir una renta jugosa en el partido de ida y así se quedó demostrado ayer. Este año a la hora de introducir sistemas y forma de jugar le dí mucha importancia a tener a Pope en el equipo, que aunque sea el jugador más determinante de la liga como se ha demostrado (básicamente porque a todos los equipos de arriba se los ha merendado), una baja inesperada en el último momento puede pasar, y no supimos reponernos del golpe moral que nos ocasionó en el partido de ida (en esto tengo toda la culpa de no mentalizar bien a mis jugadores antes de salir a calentar, en parte porque yo no conseguí hacerlo), aun así hicimos un partido horrible y encima ellos tuvieron un acierto fuera de lo normal, lo que hicieron 18 puntos de desventaja que en cualquier caso fueron excesivos para lo que se vio.
El panorama era desolador para el partido de vuelta, o eso pensaría cualquiera que viera el resultado, pero esto es un EQUIPO con mayúsculas y entre todos nos concienciamos de que era posible la remontada, estoy seguro que cualquier otro equipo la hubiera dado por perdida pero por poner un ejemplo, el viernes después del entrenamiento cenamos todos los que fuimos, incluido Fran que tenía a las 9 un examen, ¡eso es compromiso!
Con la idea de la remontada fuimos a Molina y empezamos a jugar al baloncesto como sabemos hacerlo: pase interior, corte, penetración, acompañar, doblar, tirar y rebotear en ataque hacía que Molina no pudiera seguirnos, 9 arriba al descanso y con la sensación de haber perdonado o si no hubieran estado afortunados en los triples sobre la bocina de la posesión estaríamos con la eliminatoria casi empatada, ¡en sólo 20 minutos! El público y el equipo contrario se ponían nerviosos e intentaban meter presión a los árbitros que controlaban el partido perfectamente. En el descanso llegó el momento de inflexión del partido, ante el panorama, su archiconocido director deportivo baja a la pista (¡qué casualidad!) y el partido dio un giro de 180º en la segunda parte: de repente todo el dominio interior de nuestros pívots se convierten en faltas en ataque cuando cogen un rebote y ellos cargan desde fuera arramblando con lo que pillan y no es sancionado, eso les hace reducir la distancia a 4 puntos produciéndose la jugada clave del partido: una dudosa antideportiva en la lucha por intentar coger la posición (donde nuestros interiores eran agarrados continuamente) y nuestro jugador es sancionado con técnica al reprocharle al banquillo molinense los insultos que le proferían (actuaron como grandes veteranos en ese momento y nuestro jugador picó), 4 tiros libres más posesión que fue una losa muy dura de levantar y aquí es donde tengo la mayor culpa, puesto que debíamos haber planteado el ganar el partido y tirar la eliminatoria y no quise hacerlo, me la jugué a intentar ganar la eliminatoria y perdimos de 5.
Esto no quiero que suene a lamento ni nada de eso, Molina es un equipazo que probablemente sin que hubiera pasado nada raro se hubiera llevado la eliminatoria al 98% después de tener 18 puntos de renta, que ha jugado a medio gas muchos partidos y aún así los ha ganado todos y en el momento de la verdad también lo han hecho (se nota que han tenido una planificación muy buena). Una afición muy ruidosa aunque no muy educada y una estructura de club digna de equipo de liga profesional.
Los árbitros no estuvieron mal ni mucho menos, creo que fue una jugada puntual la que cambió el partido y si fuera Mou diría ¿por qué?, pero siendo sinceros teníamos que hacer un partido perfecto después de eso para conseguirlo y no lo hicimos ni por asomo donde asumo la mayor parte de culpa como dije antes.
Y de mi equipo, que al fin y al cabo es lo que importa, estoy muy orgulloso y tengo unos cuantos jugadores que si este año la categoría se les quedaba cortita, acaban de demostrar que una temporada más se les quedaría enana y lo peor de todo, que sería un paso atrás en su formación porque varios son muy jóvenes. Estoy muy orgulloso de todos y sobre todo porque a este último partido lo ha envuelto una capa de confianza, de esfuerzo, de compromiso y de compañerismo que no había vivido nunca, lo que vi antes y después del partido fue espectacular, ni malas caras, ni un mal gesto y un equipo entero volcándose con un compañero que estaba llorando para consolarlo; por la noche de fiesta (a la cual estoy muy fastidiado por no haber podido ir) y unos compañeros con las novias recogiéndose seguramente más tarde que los de Molina, pero es que había algo que celebrar, y es que este equipo va a durar para siempre esté donde esté, sino físicamente el equipo la relación entre sus componentes. A nuestros fieles seguidores también un gran abrazo porque lo han sido todo para nosotros, muchísimas gracias por todo amigos.
P.D: si queréis despedimos el año con una barbacoa.